jueves, 18 de septiembre de 2008

CONEJO TEJIDO


HOLA QUIERO MOSTRARLES ESTE CONEJITO QUE TEJI GRACIAS A UN PATRON QUE ENCONTRE EN UNA PAGINA MUY BONITA DE UNA PERSONA MUY ESPECIAL, SE LLAMA SOL Y DIGO ESPECIAL PORQUE DEBE SERLO AL TEJER COSAS TAN BONITAS COMO ESTA.


ESTE CONEJITO SE LLAMA TOCHTLI Y ES MUY ESPECIAL PARA MI, PORQUE FUE UN REGALO QUE LE HICE A MI FLACUCHITO, SE ENCUENTRA ACOMPAÑADO DE ESTE LINDO AMIGO QUE SE LLAMA POZOLE, USTEDES PREGUNTARAN PORQUE, SIMPLEMENTE PORQUE ES PURA TROMPA Y OREJA.


LES DEJO LA DIRECCION POR SI SE ANIMAN A TEJERLO


http://solteje.blogspot.com/2007/12/patrn-conejo-punto.html

miércoles, 10 de septiembre de 2008

Y segui tejiendo



una vez que terminé mi suéter, me entró el gusanito de seguir tejiendo y tejiendo, asi que comenzé con este hermoso chaleco en color amarillo, tambien tejí esta bufanda en estambre matizado ideal para este epoca de frio que ya comienza.

comenzando a tejer




Quiero comentarles antes que nada, que hasta hace un año no me interesaba absolutamente nada que tuviera que ver con el tejido, mi hermana casi casi es una arañita teje mucho y muy bonito, un dia le pedi que tejiera un sueter para mi, y por falta de tiempo no quiso, asi que me fijé la meta de empezar a tejer un sueter, empezé con este sueter en color verde, el cual por la falta de practica, tiempo y ganas me llevó un año terminarlo, así que si tu tambien quieres comenzar, nunca es tarde, es una excelente terapia para cualquier tipo de Stress.

martes, 9 de septiembre de 2008

la leyenda del maíz

La leyenda del maíz

Cuentan que antes de la llegada de Quetzalcóatl, los aztecas sólo comían raíces y animales que cazaban.

No tenían maíz, pues este cereal tan alimenticio para ellos, estaba escondido detrás de las montañas.

Los antiguos dioses intentaron separar las montañas con su colosal fuerza pero no lo lograron.
Los aztecas fueron a plantearle este problema a Quetzalcóatl.

-Yo se los traeré- les respondió el dios.

Quetzalcóatl, el poderoso dios, no se esforzó en vano en separar las montañas con su fuerza, sino que empleó su astucia.

Se transformó en una hormiga negra y acompañado de una hormiga roja, marchó a las montañas.
El camino estuvo lleno de dificultades, pero Quetzalcóatl las superó, pensando solamente en su pueblo y sus necesidades de alimentación. Hizo grandes esfuerzos y no se dio por vencido ante el cansancio y las dificultades.

Quetzalcóatl llegó hasta donde estaba el maíz, y como estaba trasformado en hormiga, tomó un grano maduro entre sus mandíbulas y emprendió el regreso. Al llegar entregó el prometido grano de maíz a los hambrientos indígenas.

Los aztecas plantaron la semilla. Obtuvieron así el maíz que desde entonces sembraron y cosecharon.

El preciado grano, aumentó sus riquezas, y se volvieron más fuertes, construyeron ciudades, palacios, templos...Y desde entonces vivieron felices.

Y a partir de ese momento, los aztecas veneraron al generoso Quetzalcóatl, el dios amigo de los hombres, el dios que les trajo el maíz.